Mi niña interior tiene brackets, uniceja y el cabello de Alice Cullen- y así la quiero

Si alguna vez escuchaste hablar de tu "niñe interior", de cómo deberíamos sanar con elles antes de poder crecer como adultos, entonces, bienvenide seas. 

Yo estoy tratando de sanar a mi niña interior. (Lo digo de forma mística, como una confesión misteriosa, pero la traducción es: ya voy a terapia).

A veces lo pintan como un proceso de sanación ruda, en la cual nos abrazamos fuertemente y sollozamos aún más, pidiéndonos perdón. Aunque una rama de este proceso si puede llegar a verse de esta forma, también hay micro acciones que nos ayudan a comprender mejor nuestar infancia, y por consecuencia, aceptarnos y sanar esas heridas.

¿Te has encontrado oyendo a tus artistas favoritos de cuando eras pre-teen, o viendo aquellas películas que entre que te causan cringe pero también te recuerdan por qué las amabas en primer lugar? ¿Vuelves a ver series o episodios de caricaturas que por muchos años te hicieron reír, y aunque el humor que tienes ahora quizás ya sobrepasó las bromas infantiles, te causan una sonrisa? ¿Logras un sueño, pequeño o grande, que tenías cuando pensaste que nunca podrías hacerlo por equis razón?

¡Felicidades! En mi breve experiencia, sin capacitación alguna más que mi propio crecimiento personal y uno que otro Tik Tok de autoayuda, creo que estás sanando esas heridas de tu infancia.

El otro día, por accidente, llegué a secarme y peinarme el cabello y el look era más o menos el mismo que Alice Cullen, de Crepúsculo. Quienes tuvieron la desafortunada coincidencia de conocerme en la pubertad sabrán que yo, como millones de personas más, era fan, mega fan, de Crepúsculo. Moría por ese mismo hairstyle a los 12 y aunque me ahorré un par de fotos "vergonzosas" cuando no me dieron permiso de cortármelo así, la realidad es que una parte de mi siempre se quedó con las ganas. 

Si ahora han tenido la afortunada coincidencia de conocerme en los últimos años sabrán que me quedaré con muchas cosas, ¿pero con las ganas? Nunca, y menos por experimentar con mi cabello. Vuelve a crecer, como nosotres, y te das cuenta que si no quedó como querías, siempre puedes modificarlo a como tú quieras y necesitas. 

A través de Tik Tok descubrí una comunidad de chicas que también querían este corte, ¡y muchas que si lo obtuvieron! Un aplauso por poder experimetar esa expresión de su identidad a través de su cabello, algo de lo que hoy soy una fiel creyente y practicante.

Hacer las paces con las heridas de la infancia también es darte cuenta que que esas fotos "vergonzosas" son un reflejo de las inseguridades que desarrollamos sin querer. Nos censuramos por las opiniones de otros, nos reprimimos y ocultamos las cosas que nos causan placer y nos hacen sonreír, por pena o por burlas. Cosas tan inofensivas como el corte de cabello de mi entonces personaje favorito de mi saga favorita, las veía como imposibles, libertades fuera de mi alcance.

Y hoy, 10 años después (más o menos), casi que sin darme cuenta estaba cumpliéndole ese deseo a la Regina de secundaria. Y vuelvo a ver esas películas que sí causan una ola severa de cringe, pero aceptar ese cringe es parte de este ejercicio constante de amor propio. En el último mes y medio verdaderamente he aprendido que amor propio es quererte en las buenas y en las malas, a un nivel superficial y profundo; self love también es tough love, así como la práctica incesante del perdón hacia nosotres mismes. A veces es recordar con cierta pena la cantidad de veces que nos peleamos a muerte por ser Team Edward o Team Jacob*, pero podemos aceptar esa pena y dejarla ir en paz. 

Crecemos. Es inevitable. Crecer es aceptar que hicimos cosas bien y cosas mal en el pasado, porque eso también es inevitable. Lo que podemos, y en cierta medida debemos hacer, es tener conciencia de que ya no somos quienes fuimos, y darnos permiso de absolver esos errores para aprender de los mismos. Merecemos darnos chance. 

Te invito a volver a escuchar la música por la cual te molestaban en secundaria, a retomar esa serie que dejaste porque no te dieron permiso de terminar o a vestirte con los atuendos que te dio pena usar por el miedo al "qué dirán". Ve y reencuéntrate a ti mismo, con la aceptación que necesitabas y que ahora te puedes dar.

*Ahora soy Team Kristen Stewart ;)